Tuve en el colegio un profesor de Filosofía buenísimo, de esos que convierten cualquier asignatura en una aventura trepidante. Iba siempre vestido con traje y
Me he convertido en agente inmobiliario (y estoy encantado). Me explico. La historia fue pura casualidad, como suelen ocurrir todas estas cosas, o al menos muchas de las
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies